Mide cuánto tiempo dedicas al trabajo para crear presupuestos en función del tiempo que necesitas.
Usa un temporizador integrado para medir exactamente cuánto tiempo requieren las tareas.
Compara los datos de tiempo con tu programa estimado para detectar el trabajo demorado y solucionarlo.
Recopila información y crea cronogramas respaldados por datos para futuros trabajos.
Haz una estimación: registra cuánto tiempo debe tomar cada tarea para planificar los cronogramas con precisión.
Mide con exactitud: usa un temporizador integrado o realiza un seguimiento manual del tiempo dedicado a las tareas.
Haz un seguimiento de varias sesiones: detén el temporizador y vuelve a la tarea más tarde.
Lleva un registro: crea un registro detallado para saber quién realizó el seguimiento del tiempo de una tarea y cuándo.
Consulta la carga de trabajo del equipo: calcula cuántas horas debe trabajar cada miembro y asegúrate de que nadie esté abrumado o con poco trabajo.
Obtén datos en tiempo real: crea informes sobre el tiempo estimado en comparación con el tiempo real que dedicas al trabajo para mantener los proyectos al día.
Aprovecha los aprendizajes: crea una plantilla para poner en marcha nuevos proyectos rápidamente y agrega plazos estimados a cada tarea.
El seguimiento del tiempo es solo el comienzo. Supervisa cómo avanza tu equipo con estas funciones, así siempre sabrás en qué estado se encuentra el trabajo.
Explora en qué trabaja tu equipo para reasignar la carga laboral y las tareas rápidamente.
Ver la gestión de recursosVisualiza el estado del trabajo de tu equipo con gráficos e información en tiempo real.
Ver los paneles de informesTu centro de control para supervisar los proyectos conectados y colaborar entre los equipos.
Ver los portafoliosElimina los riesgos asociados con la planificación de recursos. Usa el seguimiento del tiempo para medir exactamente cuánto tiempo requiere el trabajo.